jueves, 23 de junio de 2011

SINDROME DE HUMANO

Que ocurre cuando un perro se erige de entre los perros, y sigue siendo fisicamente un perro pero ya se comporta como si fuera un humano, que sucede cuando acepta positivamente su humanidad y saca brillo a su propio sol. Que ese perro ya no puede hablar el lenguaje de los perros, ahora esta fuera del lenguaje. Puede causar dolor o felicidad en el resto de perros, puede resultarles insultante o indulgente en exceso,  los rituales y vidas de los perros ya no tienen nada en comun Y no guarda ya consideracion por la personalidad de los perros, ni por lo que son, son ya un mero rumor, una cosa sin valor. El perro asi que ha borrado de su mente la consideracion a la personalidad de los otros, ha construido su voluntad fuera de si mismo y sufre la terrible soledad del tirano, del que erige lo que le rodea fuera de todo lo que los guiones establecen. La sensacion es angustiosa, una angustia que parecer proceder de las llamas del infierno, una cosa que parece esconder un grandisimo pecado, cuando es en realidad una cosa pura y autentica. Se hecha de menos entonces la tranquilidad de ser un perro mas, de comportarse de acuerdo a un plan externo, con unas pautas sencillas, de hacerse Kantiano.

El ser humano no ha decidido el riguroso acatamiento de las pautas de comportamiento, le vienen impuestas, el ser humano encuentra el estado de minima energia haciendo aquello que ha permitido que su tribu y con ella el, hayan sobrevivido; abrazar las mentiras y actuar conforme a ellas. Por eso cuando el intelecto de un hombre, junto con su poderoso espiritu, lo lleva a la ruptura, toda esa masa biologica se le manifesta en forma de sentimiento de culpa, angustia ect. Pero estos sentimientos opresivos no son nada, cuando se valora la existencia, cuando se ama la vida, e incluso se valoran los frutos de la creacion, solo entonces puede ofrecerse en sacrificio la propia tranquilidad, la propia buena conciencia. Los que entierran su voluntad frente al mundo, lo desprecian, lo asesinarian mil veces, guardan en su interior la verdadera blasfemia a dios.
    

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